Directorio del Audiovisual en Canarias

La industria de los videojuegos en Canarias con David Carmona de ACADEVI

Nos reunimos con David Carmona Ballester, programador de videojuegos, cofundador de la iniciativa docente Tenerife Juega y vicepresidente actual de la asociación canaria de desarrolladores de videojuegos ACADEVI. Estos son algunos de los puntos claves de nuestra charla sobre la industria de los videojuegos.

¿Es fuerte la industria de los videojuegos en Canarias?

Si bien en Canarias hay un número razonable de estudios, la distribución de ingresos y ventas, así cómo la producción de títulos es bastante dispar. Tenemos algunos estudios de tamaño medio que bien pueden mantenerse con la explotación de sus IPs, pero la gruesa mayoría son pequeños estudios independientes, en muchos casos no formalizados como empresas que desarrollan su actividad no en las mejores condiciones. Algunos de estos, por ejemplo, dedican parte de su tiempo al desarrollo para terceros, pudiendo complementarlo con sus propios proyectos. Otros intentan por diferentes medios, bien aportaciones propias o privadas mantenerse a flote para llevar a cabo sus proyectos.

Aunque esta visión dista bastante de lo que se quiere vender de Canarias como un HUB del desarrollo de videojuegos privilegiado, si es cierto que existe una intención, quizás no del todo bien atinada ni con los medios apropiados, de promover la industria local.

¿Funcionan los incentivos fiscales?

Los incentivos fiscales para la industria de los videojuegos en Canarias, como los que incluyen un 45% de deducción para el desarrollo de videojuegos o un 4% en el impuesto de sociedades, están diseñados para atraer inversión y fomentar el crecimiento de este sector en la región.

Canarias ha intentado aplicar incentivos fiscales para fomentar la industria de los videojuegos. Sin embargo, la producción de videojuegos no es igual a la del cine. Una película gasta una gran cantidad de dinero en pocas semanas, mientras que un videojuego lo hace a lo largo de meses o años. A diferencia de la industria audiovisual, donde proyectos pueden ser más cortos y con personal temporal, los videojuegos requieren un compromiso a largo plazo, lo que complica la reubicación de profesionales senior con sus familias.

Los estudios independientes locales podrían beneficiarse de estos incentivos, pero estos beneficios tienden a favorecer a aquellos que ya tienen un cierto capital o estructura, no necesariamente a los pequeños desarrolladores o estudios emergentes que más lo necesitan. De igual manera, aunque la ZEC ofrece una fiscalidad reducida, las condiciones para beneficiarse de ella, como la necesidad de una inversión mínima y la contratación de personal, pueden ser barreras significativas para nuevos y pequeños estudios, especialmente conformados por jóvenes que han terminado sus estudios recientemente.

¿Realmente hace falta más formación?

Actualmente ya existen bastantes programas formativos de videojuegos en Canarias. Sin embargo, las pocas ofertas de trabajo en Canarias que anualmente se disponen suelen solicitar perfiles muy cualificados y con experiencia, y no profesionales recién salidos de una formación. Muchos de estos profesionales sin experiencia no tendrán oportunidades dentro de Canarias.

Además, muchas de estas formaciones son teóricas o muy generalistas, sin proporcionar las habilidades prácticas necesarias para integrarse en proyectos de videojuegos de grandes dimensiones. Esto se agrava por la falta de profesores con experiencia real en la industria. Hay una necesidad de conectar mejor la formación con la industria real, asegurando que los programas educativos no solo sean teóricos sino que incluyan práctica real, colaboraciones con estudios y periodos de trabajo en empresas de videojuegos fuera de Canarias para luego traer esa experiencia de vuelta.

Por último, las subvenciones para la formación pueden distorsionar el mercado, incentivando la oferta de cursos no por su calidad o relevancia, sino por la disponibilidad de fondos. Esto puede llevar a una formación de baja calidad que no beneficia ni a los estudiantes ni a la industria a largo plazo.

¿Atraer empresas o exportar talento?

En lugar de atraer temporalmente producciones, la estrategia para los videojuegos debería centrarse en exportar talento y productos. Esto significa fomentar que los profesionales locales adquieran experiencia internacional y luego puedan regresar o trabajar remotamente, trayendo consigo conocimiento y conexiones que beneficien la industria local.

Además de exportar talento, debería incentivarse la creación de estudios locales que puedan desarrollar y exportar sus propios juegos, lo cual requiere un ecosistema de apoyo que incluya financiación, mentoría, y acceso a mercados internacionales.

Consejos para los estudiantes de videojuegos

  • No ceses de aprender: La formación en videojuegos es continua. Siempre hay nuevas tecnologías, herramientas y técnicas que aprender.
  • Proyectos en grupo: Trabajar en equipo no solo mejora tus habilidades técnicas sino también las sociales y de gestión de proyectos.
  • Red de contactos: Es crucial. Participa en eventos, foros, y colaboraciones para construir una red que te pueda abrir puertas en el futuro.
  • Diversificación: No te limites a los videojuegos. Las habilidades en programación, diseño, arte o producción son transferibles a otras industrias como la animación, el desarrollo de software, o la realidad virtual.

Consejos para las instituciones públicas

  • Menos intervención directa: Permitir que el mercado y la industria se desarrollen de manera más orgánica, sin entorpecer con ayudas mal dirigidas que puedan crear competencia desleal.
  • Planificación estratégica: Si se ofrecen ayudas o se interviene, que sea con un plan bien pensado, en consulta con expertos del sector, no solo con consultoras externas. Las subvenciones deben ser estratégicas, no solo para la formación, sino también para apoyar la presencia de estudios locales en eventos internacionales, marketing, y desarrollo de prototipos que puedan atraer inversiones o publicadores.
  • Evitar la duplicación: No crear estructuras innecesarias que solo consuman recursos sin aportar valor real, como observatorios sin una función clara. Mejorar la coordinación entre diferentes entidades gubernamentales y privadas para evitar la duplicación de esfuerzos y asegurar que las iniciativas se complementen entre sí.
  • Crear un ecosistema que apoye a los estudios pequeños y medianos con infraestructura, networking, y asesoramiento legal y de negocio. Esto podría incluir espacios de coworking especializados, eventos de networking, y acceso a asesores o mentores.
  • Evaluación y Seguimiento: Implementar un sistema de evaluación para las instituciones que reciben subvenciones, asegurando que realmente contribuyan al desarrollo de la industria. Esto incluye seguir la trayectoria de los alumnos formados y la sostenibilidad de los proyectos apoyados.
  • Cultura y Percepción: Cambiar la percepción sobre los profesionales de videojuegos, mostrándolos como parte de una industria tecnológica y creativa de alto valor.

Consejos para los estudios independientes

  • Networking: Es vital. Asistir a eventos, ferias, y participar activamente en la comunidad de desarrolladores para encontrar oportunidades de colaboración y publicación.
  • Visibilidad: Utilizar todas las plataformas disponibles para mostrar tu trabajo para ganar visibilidad.
  • Movilidad: No tener miedo de moverse geográficamente. A veces, salir de tu zona de confort puede llevar a oportunidades mucho mayores en otros lugares.
  • Proyectos manejables: Centrarse en desarrollar juegos que puedan completarse en plazos más cortos para mantener la motivación, obtener feedback rápido y tener productos en el mercado.

Finalmente, agradecer a David compartir su experiencia y desearle mucha suerte con sus emprendimientos.